Como un "día histórico" calificaron los industriales gasíferos la puesta en marcha de la planta. Nuevos clientes, gas vehicular y, eventualmente, un segundo complejo aparecen como metas.
GNL Quintero -la sociedad compuesta por BG, Endesa, Enap y Metrogas- inició formalmente esta semana sus operaciones comerciales, inyectando gas natural licuado a toda la zona central del país. El hecho fue catalogado de histórico por los representantes de la industria gasífera nacional, quienes resaltaron el fin a la monodependencia que existía hasta hace un par de meses. Entre julio y septiembre Chile habrá recibido, en Quintero (localidad ubicada en la costa central del país), gas desde lugares tan disímiles como Trinidad y Tobago, Guinea Ecuatorial y Egipto. La operación del terminal, que costó US$ 1.100 millones, fue celebrada por el sector. El secretario ejecutivo de la Asociación de Distribuidores de Gas Natural (AGN Chile), Carlos Cortés, afirmó que "tener un terminal de este tipo no es gratis, pero garantiza grados de confiabilidad y de continuidad de suministro que por estos días, de otra manera, no se pueden tener". El gerente comercial de Metrogas -empresa que posee parte de la propiedad del terminal de GNL-, Mauricio Russo, confirmó que en torno al 90% de la distribución de gas que realizan (que por estos días se encumbra a 1,9 millón de metros cúbicos diarios) ya proviene de Quintero. Respecto de las millonarias inversiones que el país realizó en materia de gasoductos -en total cuatro ductos que unen Chile con Argentina-, Cortés destacó que estos son proyectos privados. "A ellos les sobra la capacidad inventiva para rentabilizar sus inversiones y no me cabe duda que los dueños de esos proyectos van a ver la forma de sacarles provecho", afirmó el representante de la industria gasífera, quien confía que esta infraestructura no quedará como un "elefante blanco enterrado". En octubre ya habría gas disponible para vehículos
La llegada del GNL no sólo asegura el abastecimiento, sino que permitirá retomar los negocios detenidos en 2004, causados por la baja del suministro argentino. El parque vehicular podría en octubre contar nuevamente con suministro. Las certificaciones, tanto de vehículos como de distribuidores, están en curso. Además, la industria cuenta ya con otro objetivo en la materia. "Esperamos que en el mediano plazo se generen las condiciones para que las grandes ciudades del país cuenten con buses que aprovechen a firme esta tecnología, tal como ocurre en las principales capitales del mundo", dice Cortés. Industriales no descartan la creación de un nuevo terminal en el país
La entrada en operación de GNL Quintero marca el estreno de Chile en el uso de este tipo de tecnología. Para enero, en tanto, se espera el debut del proyecto GNL Mejillones, iniciativa en la que participan Codelco y Suez Energy. Sin embargo los industriales del gas no descartan que se puedan sumar otros terminales. "En la medida que las condiciones lo hagan necesario, si se necesita otro terminal, sin duda los inversionistas privados, los actores que están vinculados a este mercado, lo van a evaluar", afirma Carlos Cortés. El ejecutivo añade que "si hay un mercado comercial que esté insatisfecho y que requiera más gas, no descartamos que en el futuro se pueda desarrollar un proyecto del tipo. Los privados van a estar disponibles". A diferencia de otros combustibles, el GNL no posee un indicador internacional claro que marque su precio, como pasa -por ejemplo- con el petróleo. Fuentes de GNL Quintero explican que el precio del recurso se fija a través de una fórmula que contempla en parte el indicador del petróleo brent, el indicador de gas natural Henry Hub, los costos de traslado y el valor de la regasificación. A Quintero, sin el costo de regasificación, el gas llega en torno a los US$8 ó 9 por millón de BTU, que es una unidad energético-calórica. |
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